¿Que es el Acné?
El acné es una condición común de la piel que inicia generalmente en la pubertad o adolescencia. Los cambios hormonales provocan un aumento de secreción de las glándulas sebáceas. Y esto, que junto con las células muertas de la piel y bacterias presentes en la piel provocan la aparición de granitos o espinillas. Existen diversos tratamientos dermatológicos para el acné, los cuales veremos a continuación.
Se puede presentar desde puntos negros, barritos, espinillas hasta formas más severas como nódulos inflamados o pseudoquistes. Estas últimas pueden llegar a dejar cicatrices importantes. Lo más común es que afecte la cara, pero también se puede presentar en cuello, pecho y espalda.
¿Que soluciones existen?
Existen recomendaciones simples que pueden ayudar a controlar el acné, o evitar que empeore. Algunas de estas recomendaciones son: lavar la cara mañana y noche, no usar cremas grasosas y no pellizcar los granitos para evitar cicatrices. Hay controversia sobre si los alimentos influyen o no, pero se recomienda llevar una dieta balanceada y evitar alimentos con un alto índice glicémico.
El acné es una condición de la piel muy característica por lo que el diagnóstico se realiza con la simple observación sin necesidad de pruebas adicionales.
Existen diferentes productos y medicamentos que varían según el grado de severidad.
Los jabones de limpieza, antibióticos tópicos, retinoides, antibióticos orales e isotretinoína son para casos más severos.
Hay algunos tratamientos dermatológicos para el acné, que pueden usarse en conjunto para mejorar el acné y las cicatrices, como lo son los peelings, micropunciones, IPL y el láser CO2 fraccionado.